El término brecha digital alude a la desigualdad de las personas en el acceso, uso y formación en tecnologías digitales. Actualmente, la tecnología digital está presente en todas las actividades de la vida diaria y la falta de competencias digitales genera un riesgo de exclusión social y económico. Esta desigualdad o brecha puede estar motivada por distintos motivos: localización geográfica, condiciones económicas, nivel de formación, edad, género, etc.

Una de las estrategias más efectivas para reducir la brecha digital es el desarrollo de competencias digitales para la ciudadanía y los trabajadores. De la importancia que tiene la formación para que las personas puedan avanzar en su acceso a la tecnología y a mejores condiciones profesionales, nos habla un reciente informe sobre la participación de los trabajadores en acciones formativas en competencias digitales realizado por Cedefop y el Joint Research Centre (JRC) de la Comisión Europea. Revela que el perfil de los trabajadores que más participan en cursos de formación en competencias digitales es: personas que tienen baja cualificación digital para su trabajo, que tienen menos competencias digitales que las que su trabajo requiere, mujeres mayores y personas con menor nivel educativo.

Los resultados de este informe indican el camino para que responsables políticos, empleadores y el sector de la educación y formación puedan emprender acciones que reduzcan la brecha digital y fomenten iniciativas inclusivas de capacitación en habilidades digitales.

Formación para reducir la brecha digital

En este sentido, el Plan Nacional de Competencias Digitales (PNCD) del Gobierno de España, que tiene como objetivo la formación e inclusión digital de todos los ciudadanos para que afronten con éxito el proceso de digitalización, destina un total de 3.750 millones de euros en el período 2021-2023 para distintas iniciativas de capacitación. Algunas de sus siete líneas de actuación se dirigen expresamente a resolver brechas digitales existentes en la sociedad española.

Línea 1. Capacitación digital de la ciudadanía

Esta línea, que persigue dotar de competencias digitales básicas a los ciudadanos, para que puedan participar activamente en la sociedad digital, tiene como objetivo elevar el porcentaje de población española con competencias digitales básicas al 80% (actualmente estaría en el 64%).

Además, se centra en los colectivos que encuentran más dificultades para adquirir estas competencias: personas mayores, con bajos niveles de renta, con bajo nivel educativo o de zonas no urbanas. Son personas que, en muchos casos, no poseen dispositivos electrónicos ni conectividad; por ello se recomienda la creación una red nacional de centros de capacitación digital y propone la creación de una plataforma que oferte cursos gratuitos de forma masiva (MOOC).

Línea 2. Lucha contra la brecha digital de género

El PNCD pone especial atención en cerrar la brecha digital de género, que crece conforme más avanzado y especializado es el uso de la tecnología, para garantizar la participación plena de la mujer en la sociedad y economía digitales.

Las medidas propuestas en esta línea tienen como objetivo fomentar las vocaciones científico-técnicas en el sistema educativo y la presencia femenina en las profesiones tecnológicas, ya que solo el 16,2% de los especialistas en tecnologías de la información y comunicación (TIC) son mujeres.

Línea 6. Desarrollo de competencias digitales para las pymes

Diferentes estudios constatan la brecha digital existente entre las grandes empresas y las pymes, destacando que el 86% de las pymes españolas no tienen un plan de digitalización. El PNCD propone impulsar las distintas iniciativas de transformación digital de las pymes ya existentes al tiempo que pone en marcha nuevas acciones formativas en digitalización orientadas a la internacionalización empresarial.

Iniciativas para reducir la brecha digital

Recientemente se han puesto en marcha diferentes iniciativas de formación, amparadas por el PNCD, que tienen como uno de sus principales objetivos la reducción de las brechas digitales que afectan a determinados colectivos.

Una de ellas es la convocatoria de ayudas para desarrollar programas de formación en competencias digitales básicas, puesta en marcha por el Ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública, gestionada a través de Red.es. Su objetivo es proporcionar competencias digitales básicas, aplicables en la vida cotidiana, a personas que carecen de ellas, con el fin de reducir la brecha digital. Esta convocatoria forma parte del Plan Nacional de Competencias Digitales, del que ya hemos hablado anteriormente.

Los programas que se financien a través de esta convocatoria, dotada con un presupuesto de 45 millones de euros, tendrán como objetivo concreto ofrecer acciones formativas, prácticas y gratuitas, a cerca de 210.000 personas pertenecientes a los siguientes colectivos: personas mayores, discapacitados, personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social y población sin competencias digitales básicas.

Otra de las iniciativas, que tiene como principales objetivos reducir la brecha digital y de género es DigitARTE puesta en marcha conjuntamente por el Ministerio de Cultura y la UNED. Esta iniciativa, financiada con 5,5 millones de euros de los fondos europeos Next Generation, ofrece formación gratuita sobre competencias digitales dirigida a profesionales del ámbito cultural y creativo.

Este programa pretende capacitar a al menos 2.000 profesionales del sector en gestión digital de la producción cultural y la creación de contenidos culturales digitales. Esta formación, incluida también en el Plan Nacional de Competencias Digitales, ha sido promovida por el Observatorio para la Igualdad de Género en la Cultura con el objetivo de reducir la brecha digital y de género en el mundo de la cultura. Por ello, en el proceso de selección de participantes se dará prioridad a las solicitudes de mujeres, de personas de municipios de menos de 50.000 habitantes y a las personas mayores de 40 años.