En este segundo post sobre la evaluación de la formación presentamos los resultados más significativos de la evaluación conjunta de las convocatorias de subvenciones para la ejecución de planes de formación de oferta – los dirigidos prioritariamente a trabajadores ocupados – en los años 2010 y 2011 y de la primera convocatoria del Programa específico de jóvenes en 2011.
Alcance y cobertura
Las convocatorias de formación de oferta estatales han facilitado la formación de 789.553 participantes en 2010 y 579.324 en 2011, la mitad de los participantes en formación de oferta en España en estos dos años, incluyendo las convocatorias autonómicas. Con una tasa de cobertura del 3,1% del total de trabajadores en 2010 y el 2,4% en 2011.
Por otra parte, se observa una importante reducción de participantes en 2011 (el 26,6%) en contraste con al aumento continuado de participantes en la formación de demanda. Este descenso viene fundamentalmente determinado por la reducción presupuestaria para esta iniciativa, en torno a un 30%.
El Programa específico de jóvenes, formó en 2011 a cerca de treinta y tres mil desempleados menores de 30 años, lo que supone un 3,4% de los desempleados de ese segmento de edad.
Calidad y adecuación a las necesidades de empresas y trabajadores
La mayor parte de los de los participantes en la formación de oferta (88%) valora como buenos o muy buenos aspectos como la organización, contenidos, materiales, instalaciones, docentes y duración de los cursos. En el caso del Programa de jóvenes este porcentaje se eleva al 95%.
En cuanto a la adecuación de la formación a las necesidades del mercado de trabajo, la evaluación concluye que el instrumento para definir los criterios para el desarrollo de la oferta formativa sectorial (Plan de Referencia Sectorial) tiene que ser reorientado para conseguir un mejor logro de los objetivos que persigue.
Por otra parte, pone de manifiesto que los planes de formación se deben adecuar más a las necesidades de formación y no tanto a los requisitos formales indicados en la valoración técnica.
Impacto de la formación
La mayor parte de los participantes en formación de oferta reconocen que esta ha contribuido a mejorar sus conocimientos en la materia: un 83% en 2010 y un 70% en 2011; y casi un tercio, señala un grado alto de utilización de los conocimientos aprendidos. También la mayoría (59%) cree que la formación le ha ayudado a progresar en su carrera profesional y un importante porcentaje (40,6%) cree que ha contribuido a mantener su empleo. Sin embargo, su efecto en la mejora de las condiciones laborales es reducido, particularmente en la mejora de los niveles salariales (19,8%).
El 68,1% de los desempleados participantes ha encontrado algún empleo tras finalizar la formación; entre quienes encontraron empleo, el 30% lo ha hecho en actividades relacionadas con el curso en el que participaron.
Los resultados de inserción laboral en el Programa específico de jóvenes son positivos: el 62,4% han conseguido empleo en algún momento después de la finalización de la formación y el 35,3% se encontraba trabajando en el primer trimestre del 2014.
Formación online
La teleformación es – y cada vez lo será más – una importante herramienta para la formación aunque su consolidación y estabilización aún están por definir.
Hay una notable diferencia en la duración media de los cursos según la modalidad en que se imparten: 117 horas para teleformación y 36 horas para la modalidad presencial; esta mayor duración puede ser debida al interés por sobredimensionar los costes por alumno, ya que el coste medio en teleformación asciende a 610,01€ frente a los 399,23€ en presencial.
Certificados de profesionalidad
Las acciones vinculadas a la obtención de certificados de profesionalidad, aun suponiendo un pequeño porcentaje del total, han registrado un fuerte incremento de participantes: en 2010 eran menos del 1%, elevándose al 2,6% en 2011.
Aunque se trata de una apuesta estratégica para dotar de certificación a la formación, su utilización presenta inconvenientes para los participantes ocupados debido al largo plazo para su obtención y a que cuando estos superan las 90 horas se dividen en unidades formativas que deben ser cursadas de forma consecutiva para dar derecho a la certificación, lo que hace más compleja su realización.
Las expectativas que despiertan los certificados vía online están sujetas a una doble incertidumbre: la aceptación del mercado de trabajo y las posibilidades que ofrece la teleformación para un mejor aprovechamiento del tiempo disponible de los trabajadores.
La acreditación de la experiencia laboral, aunque ha creado muchas expectativas, está teniendo en la práctica un desarrollo muy limitado, por lo que su optimización requiere de un impulso decidido de las administraciones y de un importante nivel de coordinación.
3 pensamientos en “Evaluación de la formación de trabajadores (II): oferta y jóvenes”
Javier
Buenos días
Los módulos de los certificados de profesionalidad no tienen un mínimo de 90 horas en modalidad presencial, sino de 30 (lo mínimo para una UF)
RD 34/2008
Artículo 6. Unidades formativas.
1. De acuerdo con lo establecido en el apartado 4 del artículo 5 del presente Real Decreto, y con el fin de promover la formación a lo largo de la vida, el Servicio Público de Empleo Estatal con carácter general, siempre que proceda, subdividirá para su impartición los módulos formativos incluidos en los certificados de profesionalidad que superen las 90 horas, en unidades formativas de menor duración que, en todo caso, no podrán ser inferiores a 30 horas de duración.
Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo
Javier:
Te agradecemos el interés por nuestro blog y el comentario que realizas sobre las acciones formativas vinculadas a certificados de profesionalidad. Reconocemos que la redacción de este párrafo del post, fruto de la síntesis de un extenso informe, no es afortunada y no responde a la idea que se quería transmitir.
Lo que se trataba de decir es que la utilización de la formación de oferta para la obtención de certificados de profesionalidad en modalidad presencial presenta dificultades – debido a las características de éstos – que limitan notablemente la utilización de esta vía por parte de los trabajadores ocupados. Estos inconvenientes vienen determinados por la larga duración de los certificados, y, por otra parte, a que cuando estos superan las 90 horas se dividen en unidades formativas que deben ser cursadas de forma consecutiva para dar derecho a la certificación, lo que hace más compleja su realización.
Modificaremos el texto del post en este sentido.
Naty
En mi experiencia los certificados de profesionalidad siguen siendo el gran desconocido. Nadie sabe muy bien que son, para que sirven y si el entorno privado los valora o no. Se debería clarificar mucho más este tipo de formación.